La coqueluche volvió a encender las alertas en Argentina. En lo que va de 2025, siete bebés menores de dos años murieron por esta enfermedad respiratoria que está avanzando con fuerza en casi todo el país. El Ministerio de Salud confirmó 688 casos y más de 5.100 sospechosos, cifras que no se veían desde antes de la pandemia.

El aumento golpea sobre todo a la provincia de Buenos Aires y a la Patagonia, donde un brote en Tierra del Fuego hizo subir los contagios en toda la región. Los especialistas advierten que los más expuestos son los bebés que todavía no recibieron sus primeras dosis de vacuna: solo cuatro de los niños fallecidos tenían menos de seis meses y ninguno tenía el esquema iniciado.
La situación muestra una fuerte desigualdad entre provincias. Mientras Tierra del Fuego, La Pampa y Mendoza mantienen buenas coberturas de vacunación, lugares como Buenos Aires, CABA, Santa Fe y Misiones tienen niveles bajos, especialmente en los refuerzos de 5 y 11 años, lo que facilita la circulación de la bacteria.
Los pediatras insisten en que la vacuna es la única herramienta que puede frenar estas muertes, y remarcan que también es clave la inmunización en embarazadas, que protege a los bebés desde el nacimiento. Con la enfermedad en ascenso, las autoridades piden no postergar controles y completar los esquemas: “La coqueluche es prevenible, pero solo si la comunidad se vacuna”, advirtieron.
Comentarios
Publicar un comentario